miércoles, 26 de marzo de 2014

Costa Rica Entre volcanes y playas.Los volcanes de la cordillera central y el parque de Tortuguero, en el Caribe, protagonizan este viaje por Costa Rica


P. N. Cahuita Este enclave de playas blancas y arrecifes de coral se halla al sur de Puerto Limón y cerca de la frontera con Nicaragua.


Parque de Tortuguero Además de la larga playa donde desovan las tortugas, el otro atractivo de la reserva es navegar por sus canales. El acceso al parque es el pueblo de Puerto Limón.


Volcán Arenal La mejor perspectiva se consigue desde La Fortuna. Su cono humeante suele estar envuelto entre nubes.


Tabacón Las aguas calientes del volcán Arenal alimentan las piscinas termales de este centro balneario, situado a 13 km de La Fortuna. Desde su restaurante se divisa el cono volcánico.


Volcán Arenal Una gran laguna rodeada de pastos y bosques ocupa la llanura que se extiende al oeste del Volcán Arenal


P. N. Volcán Poás El área de las Cataratas de La Paz, en la ladera nordeste del Poás, tiene un jardín de colibríes y otro de mariposas.


Valle de Orosi La iglesia de Nuestra Señora, en Ujarrás, es una de las muestras de arquitectura colonial más antiguas del país. Se encuentra en una zona de cafetales y pequeñas aldeas.


P. N. Irazú Un lago de aguas verdes ocupa el fondo del cráter Principal del Irazú, el volcán más alto del país, con 3.432 m. Los pueblos indígenas de la zona lo llamaban «la montaña del trueno».


Costa Rica y el mar Caribe Los parques de Tortuguero y Cahuita son el gran atractivo natural del litoral atlántico de Costa Rica.


Costa Rica entre volcanes y playas.Un recorrido por el país con más biodiversidad del mundo


Puro Caribe Playas bordeadas de cocoteros y cultura jamaicana son los rasgos genuinos del Caribe costarricense. Puerto Limón es la base para recorrer esta región. En la fotografía, playa de Manzanillo.


Río Fortuna El río fortuna salta desde 70 metros de altura en medio del verde esmeralda que tapiza la base del volcán arenal.


Un edén de fauna y flora Las 28 reservas naturales de Costa Rica atesoran el 4% de la biodiversidad de todo el planeta.


P. Nacional Corcovado Su densa floresta, surcada por decenas de ríos y ciénagas, alcanza las orillas del océano Pacífico.


La Fortuna La energía del volcán Arenal emerge en forma de aguas termales que son aprovechadas desde antiguo. En la imagen, el balneario de Tabacón.


Ranario de Monteverde La rana de ojos rojos es una de las veinte especies que pueden verse en este espacio rodeado de bosque nuboso.


Volcán Poás Una red de senderos y miradores descubren los tesoros de este parque. De los dos cráteres de la cumbre, solo es posible acceder al que está ocupado por la laguna Botos.


Parque Nacional del Arenal El cono perfecto de este volcán se refleja en las aguas del inmenso embalse de la laguna del Arenal.


Giovanni Belzoni en Abu Simbel.En 1816, Giovanni Belzoni, un antiguo artista de circo reconvertido en buscador de antigüedades, descendió en barco por el Nilo hasta Abu Simbel. Allí, en dos campañas sucesivas, rescató de las arenas del desierto el gran templo funerario de Ramsés II

El gran templo de Ramsés II en Abu Simbel, cubierto por la arena. Grabado por David Roberts realizado en el año 1838 para el volumen I de la obra Egipto y Nubia.


Belzoni vestido como un otomano Belzoni aparece vestido a la usanza otomana en una ilustración para su libro Viajes por Egipto y Nubia. Milán, 1825.


Estatuas osiríacas Reciben este nombre por la postura que adoptan, emulando al dios del Más Allá, Osiris. Interior del gran templo de Abu Simbel.


Pórtico del Ramesseum El primer trabajo de Belzoni en Egipto fue el traslado de un colosal busto caído del faraón Ramsés II, bautizado como el joven Memnón, desde su emplazamiento original en el Ramesseum, en la actual Luxor, al Museo Británico en Londres.


El gran templo de Abu Simbel Cuando Giovanni Belzoni excavó en 1817 el gran templo de Abu Simbel dijo que «era uno de los templos más magníficos» que existían, tanto por su tamaño como por su decoración.


"El Sansón Patagonio" Giovanni Belzoni como el Sansón Patagonio, en 1803. Grabado en color por R. H. Norman. Biblioteca Británica, Londres.


martes, 18 de marzo de 2014

El gran triunfo del emperador Trajano.La conquista del reino de los dacios, en la actual Rumanía, no sólo dio al Imperio una nueva provincia, sino también un inmenso botín que Trajano exhibió orgulloso en su retorno triunfal a Roma

Las legiones de Roma Casco de un legionario del ejército de Trajano. Siglo II. Museo de Israel, Jerusalén.


La derrota frente a Roma La guerra en Dacia acabó con la toma por los romanos de la capital, Sarmizegetusa, a pesar de su encarnizada defensa, hecho que se recrea en este relieve de la columna Trajana.


La fuerza del ejército dacio Los dacios y sus aliados nada pudieron contra la fuerza de las legiones. Arriba, armas dacias ofrecidas como trofeo. Detalle de la columna Trajana (copia). Museo Nacional, Bucarest.


Festejos en el Coliseo Para celebrar su gran triunfo sobre los dacios, Trajano organizó en el Coliseo unos impresionantes juegos que duraron tres meses y atrajeron a cinco millones de espectadores.


El Foro de Trajano El botín logrado en las guerras dacias permitió al emperador Trajano construir un nuevo foro, en cuyo centro se alza imponente la columna trajana, que conmemora sus victorias.


El poderoso ejército de Decébalo Casco de un guerrero dacio, en oro repujado, procedente de Poiana Prahova (Rumanía). Siglo IV a.C. Museo de Bucarest.


La gran abadía de Occidente Montecassino.Ora et labora, «reza y trabaja»: tal fue la máxima que impuso Benito de Nursia a los monjes que formaron con él, a principios del siglo VI, un monasterio que se convertiría en el mayor centro de saber de la Cristiandad

La abadía bombardeada Imagen de Montecassino en ruinas, tal como quedó en 1944 tras el bombardeo de los aliados durante la segunda guerra mundial.


El santo fundador La miniatura sobre estas líneas, de un manuscrito musical, muestra a san Benito entronizado, venerado por varios monjes y flanqueado por dos santos que sostienen su báculo y su mitra. Siglo XVI. Biblioteca de Montecassino.


El patio de Montecassino El acceso a la basílica de Montecassino se realiza a través de este patio renacentista realizado por Bramante en 1595.


El secuestro de San Benito Unos monjes trasladan las reliquias de San Benito a la abadía de Fleury. Relieve de la puerta norte de esta abadía benedictina francesa.


La vida en un monasterio Esta escena de la vida de san Benito muestra uno de los milagros del santo, que con la fuerza de su fe consiguió harina para el monasterio en época de carestía. Fresco de la abadía de Monte Oliveto Maggiore. Siglo XVI.


Los monjes en el scriptorium San Jerónimo escribe en un scriptorium como el de los monasterios benedictinos. Maestro del Parral. Hacia 1490. Museo Lázaro Galdiano, Madrid.


Florencia La cúpula de Brunelleschi.¿Cómo pudo un orfebre, célebre por su mal carácter y sin formación académica como arquitecto, construir una de las joyas más bellas del Renacimiento italiano?

Iniciada en 1296, la catedral de Florencia es gótica en su mayor parte, con arcos ojivales y angulosos espacios verticales. Cuando Brunelleschi empezó a trabajar en la cúpula 124 años más tarde, el estilo gótico estaba ya obsoleto.


La cúpula de la catedral de Santa Maria del Fiore, en Florencia, terminó de construirse en 1436. Sus suaves curvas y su ingeniería innovadora son un monumento al genio de su creador, Filippo Brunelleschi.


Brunelleschi diseñó su obra maestra como dos cúpulas, una dentro de la otra. Aunque no son consideradas de una excepcional maestría pictórica, las escenas de El Juicio Final pintadas por Vasari y Zuccaro en la cúpula interior figuran entre las pinturas murales más grandes del mundo.


El orbe de cobre dorado original que remata la cúpula fue diseñado, fabricado e instalado entre 1466 y 1471, pero un rayo lo destruyó en torno al año 1600. El orbe actual está protegido por un moderno sistema de pararrayos.


Como si de un espíritu protector se tratase, el Duomo parece montar guardia en las calles de la ciudad del Arno, incluido este tramo de la céntrica Via dei Servi, unos cientos de metros al nordeste de la catedral.


viernes, 7 de marzo de 2014

Italia Visita a la seductora Turín.Un paseo por los rincones más bellos de la capital del Piamonte


El emblemático Café Torino.


Plaza San Carlo Este céntrico espacio diseñado en 1638 está presidido por dos iglesias: la de Santa Cristina y la del santo que le da nombre.


La Porta Palatina (siglo I a.C.), en la plaza de Caesare Augusto.


Escalinata del Palacio Madama.


Sarcófago de Kha, Museo Egipcio de Turín.


El majestuoso Palacio Reale preside la plaza Castello.


El histórico local Baratti & Milano, abierto en 1858.